Con el paso del tiempo las tendencias en el sector turístico evolucionan según su relevancia o actualidad. Los primeros estadios de la actividad turística se caracterizaron por el diseño de destinos y productos turísticos destinados para el consumo de masas y fundamentados principalmente en recursos naturales.
Una vez el producto fue establecido y la demanda lo asimilo, destinos y empresas comenzaron a competir en aspectos como la profesionalización y estandarización del servicio ofrecido, con tal de diferenciarse unos de otros en función de la calidad percibida por el turista.
Actualmente debido al aumento de la conciencia con respecto al planeta y los rápidos cambios tecnológicos que se producen constantemente la tendencia del sector nos dirige hacia una mayor digitalización y sostenibilidad de este.
¿A QUÉ HACE REFERENCIA LA CALIDAD TURÍSTICA?
La calidad turística surge como está segunda tendencia del sector turístico. Una vez oferta y demanda turística se encontraron, la competencia se dio en la capacidad de satisfacer las necesidades de los turistas según unas expectativas y requisitos predeterminados.
Cuando pensamos en calidad turística esto es lo primero que se nos viene a la cabeza, pero esta área de la gestión turística va mucho más allá. La calidad turística no solo aporta beneficios para el cliente, sino que también puede resultar muy positivo para un destino o un servicio turístico ya que además de diferenciar aporta otras herramientas que pueden ayudar a mejorar el funcionamiento de una organización y por lo tanto ofrecer un servicio de calidad con más facilidad, como por ejemplo:
- Conocer mejor nuestra organización, su entorno y su relación con agentes internos y externos.
- Designar roles, responsabilidades y autoridades.
- Dirimir los riesgos y oportunidades de nuestra actividad y diseñar acciones para abordarlos.
- Contar con un conjunto de documentos estandarizados que nos ayuden en el desempeño de nuestra actividad.
- Evaluar dicho desempeño en busca de puntos fuertes y posibilidades de mejora.
- Implantar continuamente mejoras en nuestro servicio.
La calidad en el servicio es un hecho que los turistas ya dan por sentado y para poder ser considerado un destino turístico nuestro municipio ha de tener interiorizada la necesidad de trabajar en calidad. Por eso y por todos los beneficios que aporta a una organización contar con un sistema de gestión de la calidad sigue y seguirá siendo relevante a pesar de que las tendencias en el sector vayan evolucionando.
PRINCIPALES SISTEMAS PARA EL DESARROLLO DE LA CALIDAD TURÍSTICA EN ESPAÑA
Gracias al trabajo realizado por el sector turístico en su conjunto en los últimos 20 años, actualmente contamos con varias opciones en lo relativo a la calidad turística.
Por un lado, encontramos el sello Q de Calidad del ICTE (Instituto para la Calidad Turística Española).
El ICTE es el organismo encargado de la creación de normas de calidad turística en España y de la certificación de cualquier servicio que quiera obtener el sello. Actualmente existen más de 30 normas dirigidas cada una a un subsector turístico, desde los tradicionales como el alojamiento y las oficinas de información hasta los más novedosos como los destinos turísticos inteligentes y los servicios de sostenibilidad turística.
Estas normas están compuestas por una serie de requisitos relativos a la organización interna y a la prestación del servicio que han de cumplirse y se evalúan en una auditoría externa. Una vez superada esta auditoría mediante el uso del sello Q de Calidad se puede asegurar frente a terceros que nuestra organización está preparada para ofrecer servicios y productos de calidad y cuenta con un sistema de gestión diseñado para ello.
Otra de las opciones en materia turística que resultan muy interesantes es el SICTED (Sistema Integral de Calidad Turística en Destino). El SICTED es un proyecto nacional gestionado por la Secretaría de Estado de Turismo, en colaboración con la FEMP y coordinado junto a las comunidades autónomas y los municipios.
Su objetivo final es obtener un nivel homogéneo en todos los servicios de los que el turista pueda hacer uso durante su estancia en el destino: desde el transporte, el alojamiento, la información turística, la restauración, los recursos turísticos que visite, etc.
Para ello, destinos y servicios turísticos locales trabajan conjuntamente. Por su parte los servicios participantes, para los cuales la participación no supone ningún coste económico, han de cumplir con una serie de compromisos anuales que contemplan formación, talleres colectivos, visitas de asesoría, evaluaciones y participación en grupos de trabajo por la mejora del destino. Una vez cumple con todos estos compromisos, el servicio obtiene la distinción ‘Compromiso de calidad turística’.
Por su parte el destino es el encargado de gestionar el proyecto dentro de su territorio, asegurando y facilitando que las empresas cumplan con los compromisos y trabajando en la mejora continua del municipio como destino turístico.
Pero además, el SICTED ofrece otros beneficios intangibles como la implantación de mecanismos que mejoran la gobernanza turística del destino, la creación de una red estable de profesionales concienciados con unos objetivos comunes, la generación de sinergias entre los participantes y entre este y otros proyectos turísticos que el destino pueda desarrollar, el contacto directo con las administraciones públicas autonómicas y nacionales y la oportunidad de formar parte de una red que contempla ya más de 200 destinos y 6.000 servicios distinguidos.
Conocedores de que la implantación de un sistema como el SICTED puede resultar compleja en primera instancia para un destino, y que conforme van pasando los años a muchos destinos les empieza a costar gestionar el éxito de la implantación de un sistema en el que cada vez participan más servicios y empresas, SALTO Consultores ofrece un servicio de asistencia integral con totales garantías técnicas, tanto para la implantación del SICTED, como para la gestión externa y altamente profesionaliza del proyecto.
